Lunes intenso de festival en Playa del Carmen

Playa del Carmen.- El escenario del Parque Fundadores se vistió de alegría en explosión de ritmos, sones, percusiones, metales, voces y cuerdas, la tarde del lunes 15, como parte del Festival de Cultura del Caribe que auspicia el gobierno de Carlos Joaquín.

El espectáculo dio inicio a las seis de la tarde con la presentación del grupo de teatro La bambalina con Llegaron los zancudos, obra interpretada por Luis Cuevas, Paloma Andulce y Noé (actores caracterizados de payasos), dirigidos por Hirám Sánchez.

La segunda presentación estuvo a cargo de las cancunenses Norma Espinoza (vocalista) y Nadia Arce Moreno (pianista), acompañadas por la artista plástica Marisol D’Estrabeau, quien -a lo largo del recital- realizó un tríptico con motivos marinos y faunísticos caribeños.

Así, con el respaldo de la Secretaría de Educación y Cultura, que dirige Marisol Alamilla, y la Subsecretaría de Cultura, encabezada por Jacqueline Estrada, se escucharon cantos poéticos en lenguas indígenas como maya, mixteca, zapoteca, náhuatl y quechua.

Norma y Nadia buscan recatar a autores mexicanos como Manuel M. Ponce y Pablo Moncayo, a través de la dulzura de las lenguas y la precisión de la interpretación musical, que en Solidaridad fueron merecedoras del asombro y los aplausos del público asistente.

La tercera de la tarde fue la cantante mexicana María Moctezuma, impactante presentación y voz, profunda en sus contenidos con mensajes hermosos y trascendentes, expresiva en sus ritmos, con instrumentos prehispánicos y acordeón, guitarras, bajo y batería.

Con la luna en el cenit se recibió con gran entusiasmo al grupo Haitiano 4 Harmony, que trajo al escenario sus cantos tradicionales, con tambores, teclados, guitarras y voces para urdir canciones sobre la paz, la armonía entre las naciones y la reconstrucción de su pueblo.

Para cerrar la noche se tuvo la presentación del grupo venezolano Funes Music, con coloridos atuendos, energía desbordante y variedad de sus ritmos, que electrizaron al público, que no cesó de bailar intensamente hasta altas horas con mucha entrega.